martes, 8 de abril de 2014

Testimonio de Eliane Zara, superviviente del Holocausto

Este mes de junio, se conmemorarán los 70 años del desembarco de Normandía, capítulo que significó el principio del fin del Tercer Reich y de la Segunda Guerra Mundial. 

En el Colegio de Formación de Adultos Canyelles (Barcelona) una superviviente del Holocausto, Eliane Zara, explicó la semana pasada cómo recuerda su vida –y la de su familia- en el campo de concentración de Gurs, en Francia, cuando contaba con ocho años: “A mí la guerra me robó la niñez y no lo digo como una queja sino porque sé que digo la verdad”.

Eliane Zara, superviviente del Holocausto
Eliane Zara, en un momento de la charla en el colegio de adultos Canyelles.
Zara vivía en París, en 1939, cuando Alemania invadió Polonia. La familia abandonó la capital en el momento en el que se exigió a los judíos que se identificaran con la estrella de David. 

Recalaron, entonces, en Burdeos. Pero una vez que se entregó la ciudad al Reich
se dirigieron a Lyon. Pagando podías atravesar a la Francia libre mediante un túnel “frío, húmedo, nadie hablaba, muertos de miedo por ser descubiertos; no llevábamos equipaje, ni dinero ni ropa, pero creíamos que valía la pena con tal de recuperar la libertad perdida”, cuenta Eliane.

Al salir, un gendarme francés les reclamó la identificación y, como en letras bien grandes se leía “Judío”, fueron derechos al campo de concentración de Gurs: “Los hombres trabajaban y yo cuidaba de mi hermana, que, por aquel entonces y para el colmo de la mala suerte, tenía una pierna rota. En el campo dormíamos sobre unos colchones de paja, la comida era servida en unas latas de conserva vacías y el interior no era mejor. Cuántas veces al dormir no me había preguntado: '¿Por qué, si no hemos hecho nada malo, por qué se nos trata así?' Pero el frío, el hambre y la miseria no son nada comparado con el no saber lo que nos deparaba el mañana”.

Relato completo en este audio:


El campo de Gurs se construyó en 1939 para acoger refugiados republicanos que huían de las tropas franquistas, en la Guerra Civil Española. Cuando Francia cae ante la Alemania nazi, pasa a ser un campo de concentración. Antes de que esto ocurriera, el país galo usó el lugar para detener a ciudadanos alemanes (la filósofa alemana de origen judío Hannah Arendt estuvo internada). Asimismo, al finalizar la conflagración volvió a albergar a prisioneros de guerra alemanes o a franceses sospechosos de colaboracionismo.

Segundo audio con algunas de las preguntas del público:

Eliane explica que Gurs era un campo de paso, y que los considerados inútiles se desplazaban a otros lugares, en especial a campos de exterminio. También relata cómo los gobiernos de Alemania, tras la guerra, tuvieron que indemnizar a los supervivientes que habían perdido todo o parte de sus pertenencias. O que los guardias franceses eran peores que los alemanes...


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